A medida que la tecnología sigue avanzando, observamos que las casas de moda y las pequeñas marcas se adaptan y siguen su ejemplo. Todo, desde el diseño en programación 3D, los tejidos fabricados en laboratorio y la inteligencia artificial, se está apoderando rápidamente de nuestros actuales climas de moda. Mientras que esfuerzos como el cuero fabricado en laboratorio nos llevan a la vanguardia de los nuevos avances en sostenibilidad, la participación de la IA y las creaciones en 3D siguen dejando un margen importante para el descubrimiento e incluso la confusión. ¿Qué papel desempeñan estas tecnologías emergentes en nuestro mundo de la moda actual? ¿Y hacia dónde se dirigirán después? Para desglosar mejor estos conceptos, me pareció necesario retroceder hasta donde algunos dirían que empezó todo: el comercio electrónico. En este artículo analizaré el papel del comercio electrónico en el pasado y en el presente, las marcas de moda y los diseñadores que se han atrevido a encabezar este movimiento, y estableceré conexiones entre estos elementos y la situación actual.
¿Qué es el comercio electrónico?
El comercio electrónico se define como las transacciones comerciales facilitadas electrónicamente a través de Internet. Existen varios tipos de comercio electrónico, pero para mayor claridad, nos centraremos en el comercio electrónico “directo al consumidor”, también conocido como DTC. Una de las primeras marcas reconocidas por su presencia en el comercio electrónico fue Boo.com. Un minorista de comercio electrónico nacido en Gran Bretaña que en muy poco tiempo fue capaz de abrir el camino a la posibilidad de acceder a la moda en línea. Tras la andadura de Boo.com, que duró de 1998 a 2000, Net-A-Porter emprendió el mismo viaje. Del mismo modo, Amazon hizo sus pinitos en el comercio electrónico de moda vendiendo más de 100.000 dólares en pantalones. A día de hoy, Net-a-Porter está considerado como uno de los mayores espacios de comercio electrónico de moda, y Amazon tiene su propio carril en el comercio electrónico D2C con sus diversos productos.
El comercio electrónico entra en la moda
La transición de la moda de una experiencia en persona a una experiencia en línea creó vías y pasarelas para generar los conceptos emergentes que vemos hoy en día. La moda electrónica se perdería sin el comercio electrónico y su gran impacto en la industria de la moda. Tomemos como ejemplo Gucci, otra marca de moda que se arriesgó a tener un sitio web para tener presencia en el comercio electrónico. Gucci fue una de las primeras marcas de lujo en entrar en la escena del comercio electrónico de la industria de la moda y, en 2002, reconfiguró la idea de que las marcas de lujo eran exclusivas para un cliente concreto.
Entrar en la dimensión del comercio electrónico permitió a las marcas de lujo conocer mejor a su clientela por el simple hecho de disponer de medios para llegar a un público más amplio, lo que no es más que una de las muchas ventajas del comercio electrónico en la industria de la moda. Una experiencia personalizada para el comprador con pestañas como “¿Qué hay de nuevo?” permite a los consumidores tener acceso a los lanzamientos de las colecciones más recientes como otra ventaja. El objetivo explícito de Gucci siempre ha sido mantener la estética y la integridad de la marca. Con los ideales de la marca en primer plano y el DTC en segundo lugar, les ha permitido crear una experiencia agradable para el consumidor a través de su sitio web, sin dejar de dar prioridad a la experiencia de compra en persona.
El comercio electrónico de la industria de la moda fue uno de los primeros canales en los que empezamos a ver lo fundamental que puede ser la tecnología en los espacios de venta al por menor, para pequeñas o grandes empresas, y dentro de la industria en su conjunto. La industria de la moda conoció nuevas formas no sólo de llegar a los clientes con los puntos de venta DTC, sino que también empezó a tener acceso a medios de análisis mucho más rápidos. Se creó ante nuestros ojos un algoritmo de datos sobre tendencias de moda, ventas, preferencias de productos, etc. Si avanzamos rápidamente hasta nuestros días, ahora tenemos acceso a la asistencia por chat en directo a través de los sitios de comercio electrónico de la industria de la moda. Con el avance de la tecnología, las marcas de lujo y los diseñadores han obtenido herramientas más personalizadas para sus artesanías. Ahora, aplicaciones y empresas como Edited e Intelligence Node ayudan a los consumidores a hacer un seguimiento de los datos de ventas, la gestión de inventarios e incluso el seguimiento de tendencias en tiempo real.
A medida que pase el tiempo, seguiremos viendo la relación entre el comercio electrónico y la moda electrónica y cómo sigue evolucionando. Desde la inteligencia artificial que modela la ropa hasta programas y software que tienden puentes entre los esfuerzos prácticos de diseño y los cada vez mayores esfuerzos de diseño digital. La historia es nuestra mejor maestra y herramienta, y para entender hacia dónde vamos debemos saber primero dónde empezamos. Tanto si estamos preparados como si no, la tecnología y las plataformas digitales se están apoderando de la industria de la moda, y los espacios de diseño están evolucionando hacia algo que exige una mayor exploración a medida que seguimos avanzando.